La ciudad de Ibiza ha culminado con el Sello de Turismo Familiar su proceso como certificación de destino turístico familiar, después de haber obtenido ya en el año 2014 la distinción como Ciudad Amiga de la Infancia por Unicef. Con un ingente patrimonio cultural, artístico e histórico, y declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad, Ibiza ha sabido adaptarse de una manera óptima a las necesidades de las familias cuando viajan. La ciudad ha presentado un nuevo itinerario turístico para que las familias puedan disfrutar de todas las propuestas hechas por el destino: actividades culturales especialmente programadas y diseñadas para familias, visitas guiadas y teatralizadas por la ciudad, conciertos y cine para familias, así como espacios adaptados a ellas: jardines y parques diseñados teniendo en cuenta las propias peticiones e intereses de los niños.

En sus playas, con todos los servicios necesarios para garantizar la seguridad y el confort de las familias, se pueden realizar además talleres y actividades en invierno aprovechando el buen clima. Y la ciudad ha elaborado la primera guía en España de restaurantes amigos de la infancia, que se ha presentado en este mismo acto.

La UNESCO declaró Patrimonio Mundial la acrópolis de Dalt Vila (el casco antiguo de la ciudad de Ibiza), las praderas de posidonia oceánica, cuna de la rica biodiversidad marina de las Pitiusas. Dalt Vila es de hecho monumento a la Historia: en sus múltiples estratos se superpone el rastro de todas las culturas que han pasado por la isla, desde los primeros pobladores de la bahía de la ciudad de Ibiza hasta nuestros días, pasando por fenicios, cartagineses, romanos y musulmanes.

Por su parte, las praderas de posidonia –planta marina fanerógama endémica del Mediterráneo– son el origen de la belleza y transparencia de las aguas del mar pitiuso. Para divulgar este riquísimo bien natural, Ibiza tiene en marcha el programa 'Vive la Posidonia', un conjunto de actividades familiares con las que poner en valor y reconocer estos fondos marinos.